martes, 28 de abril de 2015

Ideología del franquismo

IDEOLOGÍA FRANQUISTA

Concentración de poderes: Jefatura del Estado, Jefe del Ejecutivo, Poder Legislativo, Poder Judicial, Poder Militar (Generalísimo), Jefe del Partido Único (FET de las JONS). Franco concentró más poder que ningún rey de la Historia de España.
Esto otorga a Franco un poder absoluto. Es responsable solo ante Dios y ante la Historia: carácter providencial
Fascismo: culto a la violencia y a la personalidad como Mussolini, Hitler, Stalin. Estatuas, dibujos en las paredes, monedas, sellos, en las iglesias lápidas con los caídos por la Patria y por Dios. Franco, Caudillo de España por la gracia de Dios.
Exaltación del Caudillo en la prensa, en las iglesia, en las instituciones del Estado.
Franco es un "poder constituyente" permanente:
    Fuero del Trabajo 1938
    Ley Constitutiva de las Cortes 1942
    Fuero de los Españoles 1945
    Ley de Referéndum nacional 1945
    Ley de Sucesión 1947
    Ley de Principios del movimiento Nacional 1958
    Ley Orgánica del Estado 1967
Tradicionalismo: Franco se veía a sí mismo como un continuador de la obra de Isabel la Católica (curiosamente no de la de Fernando el Católico, que había sido el modelo de Maquiavelo para su Príncipe). Se toman símbolos y formas de expresión de la época de los Reyes Católicos ("fuero", escudo con el águila de san Juan, el yugo y las flechas, "el Imperio", la Cruzada, etc).
Nacionalismo español, confundiendo España con Castilla.
Militarismo: el Ejercito es omnipresente, como la Iglesia durante toda la dictadura.
Machismo: la única mujer que detentó un cargo de cierta relevancia fue Pilar Primo de Rivera, hermana del fundador de la Falange. Fue la Jefa Nacional de la Sección Femenina, institución hipermachista, que se dedicaba a pregonar la sumisión absoluta de la mujer ante el hombre.
Catolicismo: el régimen de Franco se caracteriza por la presencia absoluta de la Iglesia católica y su credo más conservador. De ahí que a este régimen se le denomine nacionalcatolicismo. Ser español implicaba ser católico, no se entendía lo uno sin lo otro.

jueves, 23 de abril de 2015

Cifras de la guerra civil

Para los amantes de las cifras, en esta página se recogen detalladamente las cifras de muertos, represaliados, encarcelados y exiliados de la guerra civil, provincia por provincia. Por supuesto, hay estudios más detallados, pero es una panorámica interesante.

Carteles de la guerra

Este enlace lleva a una web donde se pueden ver carteles de la república durante la guerra Civil.

Este enlace es una búsqueda de google de carteles en general, donde se mezclan los de los sublevados y los de los leales a la República.

Y por último, este enlace también nos lleva a diversos carteles de ambos bandos.

Primeras fases de la Guerra civil de 1936-39


El estallido de la Guerra Civil entre el 17 y el 19 de Julio de 1936 encontró la situación militar española en unas condiciones deplorables. España no había pasado por el proceso traumático y renovador de la Primera Guerra Mundial, la situación económica no era boyante y aunque lo hubiera sido, los gobiernos republicanos tanto de derechas como de izquierdas no priorizaron los asuntos militares en las partidas de gastos, sino más bien al contrario. Así, el parque móvil blindado estaba en la absoluta ruina (no se llegaba a cincuenta vehículos) y la Fuerza Aérea estaba naciendo en estos momentos. La infantería se dividía en dos tipos, por simplificar, la peninsular de guarnición y la africana, destinada en las colonias de marruecos y el Ifni, que abordaremos ahora.
La primera fase de la Guerra Civil alcanza desde el estallido antes mencionado hasta la retirada de las tropas sublevadas de Madrid en Octubre del mismo año. El principal rasgo de esta fase y que da nombre a la misma es la llamada Guerra de Columnas. La guerra de columnas es una forma de entender un conflicto basado en pequeñas fuerzas (100 a 2000 efectivos, normalmente) que se mueven alcanzando y tomando objetivos de forma que no necesita mucha coordinación con el resto de columnas.Es una táctica propia de medios muy dispersos, como los desiertos o zonas poco pobladas como las del norte de África donde nació de mano de los franceses. España conoció y perfeccionó esta forma de combatir en las guerras de las colonias africanas durante los primeros treinta años del siglo XX. Pero, ¿por qué nace este tipo de guerra en el aspecto táctico? Las fuerzas irregulares sin entrenamiento ni experiencia, cuando defienden una posición estática, tienden a establecer una defensa en línea, es decir, a situar una única cadena de defensores alrededor del pueblo, colina, fortaleza… Las columnas atacan exactamente como su nombre indica, como un pilar que penetra de forma tangente contra la defensa horizontal, concentrando un poderoso ataque en un solo punto para rebasar las defensas enemigas y coparlas a continuación. Los defensores suelen ver que están siendo rodeados y se retiran en desorden para ser aniquilados.
Los expertos en esto dentro del ejército español y la principal baza del ejército sublevado al inicio de la guerra era la Legión Extranjera. La Legión era en su origen una tropa penal que por sus triunfos y veteranía se convirtió en una de élite, comandada por buenos oficiales que habían viajado a África por las grandes oportunidades de promoción en un ejército que se había volcado en este escenario tras la debacle cubana. La primera gran victoria de la sublevación fue conseguir trasladar a la Legión Extranjera a tierras andaluzas donde su veteranía y entrenamiento no tenían rival, ni lo tuvieron durante la guerra.
Legionarios manteniendo la posición durante la liberación de Toledo. Fuente.
Legionarios manteniendo la posición durante la liberación de Toledo. Fuente.
En el otro lado, las tropas de guarnición peninsulares sumaban un número de efectivos entorno a los doscientos mil hombres. Se trataba de tropas con una moral no especialmente alta y que adolecían la falta de mantenimiento y pertrechos modernos que ya era característica del ejército español. Por supuesto había honrosas excepciones, como el cuerpo de artillería comandado por los oficiales de la Academia de Segovia, así como algunas unidades de la Marina, especialmente los dos acorazados (El España y el Jaime I). Al inicio de la sublevación la proporción de tropas regulares que quedaron en cada bando fue más o menos proporcional al territorio dominado en los primeros quince días, es decir, a favor de la República. Sin embargo la decisión del gobierno de Madrid de disolver a la tropa con la esperanza de mermar las fuerzas levantiscas no hizo más que perjudicar a su propia capacidad de lucha en unos momentos cruciales.
En cuanto a las tropas internacionales cabe citar dos importantes aportaciones. Hablamos del Cuerpo de Tropas Voluntarias (CTV)italiano, de las tropas marroquíes del lado sublevado y de las Brigadas Internacionales con el bando leal. La calidad, material y moral, de estos cuerpos extranjeros variaba enormemente de uno a otro y todavía se debate cuál fue el impacto real de los mismos durante el conflicto. El Cuerpo de Tropas Voluntarias estaba bien entrenado y contaba con un equipo de calidad media, siendo su principal baza que era una fuerza bastante motorizada y contaba con carros de combate. Al principio disfrutaron de un mando más o menos independiente que les fue retirado (para disgusto de Mussolini) tras su mala actuación en el ataque a Madrid. Las tropas “moras” eran una fuerza pobremente equipada que compensaba estas carencias con una veteranía y unas prácticas salvajes de combate cuerpo a cuerpo que difícilmente podían ser frenadas por el bando republicano. Sobre las Brigadas Internacionales se ha escrito mucho y ha quedado claro que su principal baza era la moral, pues estaban combatiendo por algo en lo que realmente creían. Fueron utilizados como tropas de línea, armadas con material ruso y francés, donde la mescolanza de idiomas no fue un problema para que sus oficiales y comisarios dirigieran a uno de los efectivos más duros y disciplinados de la contienda.
Sin embargo en esta primera fase del conflicto la fuerza fundamental del bando republicano recayó en las milicias populares. Con el ejército regular desmovilizado y aún con la policía y la guardia civil (que eran poco de fiar) en situaciones de combate, durante estos tres meses estas milicias constituyeron el grueso del ejército republicano. Se agrupaban normalmente entorno a una organización política o sindical preexistente y elegían a sus oficiales de forma democrática o directamente  los cargos de estas organizaciones se ponían al mando. Su entrenamiento era prácticamente nulo y su armamento muy pobre. Aunque su moral fuera muy buena al principio eran rápidamente copados por las tropas profesionales enemigas o se dispersaban por una gran zona en vez de encuadrarse en un objetivo. Se puede pensar que aun así estos hombres y mujeres impidieron un avance más rápido y profundo de los sublevados, pero realmente no parece ser así. Las tropas de la legión, los regulares y coloniales se iban a detener de todas formas en los pueblos que alcanzaban para llevar a cabo la represión y el terror que tanto les caracterizaba y se trataron de objetivos que tardaron en su mayoría una tarde o unas horas en caer. El principal escollo que detuvo a las tropas levantadas fueron las ciudades.
T-26 republicano destruido. Un soldado marroquí descansa sobre los restos. Fuente.
T-26 republicano destruido. Un soldado marroquí descansa sobre los restos. Fuente.
Porque hay que tener claro un punto muy importante: Esta primera fase de la guerra lo fue de campos y pueblos, especialmente de estos últimos. Desde las zonas donde el levantamiento triunfa rápidamente en Sevilla y su área, Cádiz, Castilla y León y Navarra, parten las columnas que van tomando uno a uno los pueblos que encuentran. A la vez desde las áreas republicanas, especialmente Cataluña y Madrid, parten otras tantas columnas milicianas para hacerse con pueblos que aún son republicanos e intentar recuperar terreno. Esta rutina se vino repitiendo así hasta que el avance de las tropas franquistas se topó con las zonas más despobladas de Extremadura. Allí el Coronel Yagüe llevó a cabo un avance fulgurante basado en la motorización de sus columnas que ha llevado a muchos a decir que se trataba de un verdadero adelanto de la Blitzkrieg alemana de 1939.
A partir de alcanzar esta frontera, entorno a finales de Agosto de 1936, la guerra comienza a acelerarse. Prácticamente toda Andalucía oriental está en manos de la rebelión y los zarcillos de las columnas requetés se extienden hacia el País Vasco y Aragón. En el bando rebelde el mando se unifica en Septiembre y lo que para todos era un hecho se transforma en una orden: Hay que tomar Madrid cuanto antes. La lógica de los golpes de estado asume que la caída de la capital pondrá fin al cambio de manos del poder. Así, defender Madrid y tomarla se convierte en una obsesión para los dos bandos. Las columnas nacionales se dirigen hacia la capital virando en una larga curva para tomar Badajoz (que los retrasó tres días y costó muchas bajas a la Legión).
Desde aquí a los ejércitos franquistas se les presentaba una importante dicotomía: ir directamente hacia Madrid antes de que las defensas se pudieran terminar y llegaran más refuerzos o dar un pequeño rodeo para levantar el asedio del Alcázar de Toledo. Franco tomó en última instancia la decisión de marchar hacia Toledo para liberar a la pequeña guarnición. Posiblemente nunca quede claro si esto fue un error o un acierto, pues se sabe que las defensas de la capital no estaban listas para fechas tan tempranas y ni siquiera habían llegado los contingentes de brigadistas internacionales, pero también es sabido que la inyección de moral y publicidad que supuso la liberación del Alcázar junto con la ventaja táctica de no tener un frente enemigo en la retaguardia hicieron mucho bien a los objetivos militares de Franco.
El punto y final a esta fase de la guerra lo marca el asalto a Madrid. El general Franco había reunido un ejército de cerca de veinte mil tropas para el asalto a la ciudad, a todas luces insuficientes para una urbe que superaba el millón de habitantes, pero contaba con el impacto psicológico y la ferocidad de sus soldados de élite, así como con los primeros carros y aviones alemanes. Los republicanos consiguieron igualar las fuerzas con unos brigadistas internacionales que llegaron desfilando recibidos por entusiastas gritos de “¡Por fin llegan los rusos!” y con la creación de formaciones disciplinadas y bien equipadas como el famoso 5º Regimiento del Partido Comunista. Así mismo también se hicieron efectivos los superiores carros T26 soviéticos y los cazas “Chato”.
El Puente de los Franceses de Madrid se convierte en el punto clave de la penetración en la capital. Fuente.
El Puente de los Franceses de Madrid se convierte en el punto clave de la penetración en la capital. Fuente.
Las tropas franquistas intentaron forzar la ciudad por la zona universitaria y la Casa de Campo, logrando una penetración máxima de kilómetro y medio aproximadamente antes de que la defensa en profundidad republicana y la extenuación de la lucha casa por casa los hiciera desistir. Con este éxito la República había conseguido dejar claro al mundo y a sí misma que iba a luchar y sobre todo que podía luchar en igualdad de condiciones y vencer a las mejores tropas de Franco. A partir de aquí se organizó el Ejército Popular y el bando rebelde comenzó una guerra más pausada y táctica con más asaltos a la capital por distintos frentes y la toma de objetivos clave en otros escenarios. Con esta “estabilización de los frentes” termina la primera etapa de la guerra civil y comienza otra más clásica en el planteamiento habitual de una contienda abierta y de grandes proporciones.
Bibliografía|
BEEVOR, ANTHONY, “La guerra civil española”, Madrid: Planeta S.A, 2011
PRESTON, PAUL, “El Holocausto español”, Barcelona: Debate, 2011
“Madrid, 1936″. Desperta Ferro: Contemporánea, Madrid: Desperta Ferro Ediciones, Julio 2014.

martes, 21 de abril de 2015

La Marseillaise - Edith Piaf

La Internacional Comunista

HIMNO REPUBLICANO ESPAÑOL (Himno de Riego)

Canciones de la Guerra Civil - "Ay Carmela" - República Española

Canciones de la Guerra Civil Española Si me quieres escribir

En El Nombre De España, Paz

"El niño Yuntero" - Joan Manuel Serrat - Miguel Hernández

A Las Barricadas Himno Anarcosindicalista Letra

Himno Español / Spanish Anthem

Cara al Sol - ( Con Letra )

FRANCISCO RABAL lee a MACHADO. "El mañana efímero"

FERNANDO REY lee a MACHADO. "Una España joven"

Andaluces de Jaén - Jarcha

En el barranco del Lobo (canción española)

viernes, 10 de abril de 2015

Símbolos del franquismo en 2015 en Santander

¿Queda algún símbolo del franquismo en Santander?
Este artículo del Diario Montañés habla de ello.
Este blog detalla los nombres de calles que aún recuerdan a símbolos o a personajes de la Guerra Civil de 1936 y a la Dictadura franquista.
En este blog se habla de la pirámide del Escudo. Todavía conserva un símbolo que recuerda a Mussolini.

Los escudos de España a través de la historia

Una presentación sobre un tema curioso: la acuñación de monedas en los diversos territorios españoles durante la Guerra.


Esta presentación es bastante densa, conviene verla cuando se tiene un esquema de cómo fue evolucionando la guerra.


La censura en los medios de comunicación durante el franquismo